En los pasillos del Congreso, Hernando defendió que el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha actuado “de buena fe” al intentar investigar los crímenes del franquismo, y dijo que sus decisiones pueden ser “cuestionables”, pero no constituyen delito de prevaricación.

Defendió también el derecho de los sindicatos a expresar su respaldo al juez, porque dedican “el cien por cien de sus esfuerzos” a defender los derechos de los trabajadores pero son organizaciones con capacidad para pronunciarse sobre otros asuntos.

“Lo que exaspera”, en opinión del diputado socialista, es que 35 años después de la llegada de la democracia “sean los falangistas los que persiguen a una persona” por investigar los crímenes del franquismo e intentar devolver la dignidad a las víctimas, todo ello “de buena fe”.

No obstante, Hernando precisó que no cree que haya restos del franquismo en el Tribunal Supremo, compuesto por jueces “absolutamente respetables” que hacen su trabajo “dignamente”.