El Cermi fundamenta su queja ante el Defensor del Pueblo en un extenso informe jurídico de la Fundación Derecho y Discapacidad, elaborado por Gloria Álvarez, abogada y doctora en Derecho, en el que se acreditan como contrarios a la legislación antidiscriminatoria española las previsiones del Reglamento Taurino y del convenio colectivo de profesiones taurinas que autorizan la celebración de espectáculos cómico-taurinos protagonizados o en los que participan personas con acondroplasia.

En su informe, el Cermi indica que "esas normas entran en clara contradicción con la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y con la Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social, por cuanto amparan e institucionalizan la burla y el escarnio por motivos de discapacidad, por lo que han de ser revisadas urgentemente".

El Cermi pide también a la defensora del Pueblo, Soledad Becerril, que abra una investigación sobre la situación y las condiciones de trabajo de las personas con acondroplasia que participan en espectáculos bufos taurinos, a partir de la cual plantear al Gobierno la reforma inmediata del Reglamento Taurino y la denuncia ante la jurisdicción del convenio colectivo de este sector de actividad.