Los terroristas suicidas han causado casi 40.000 víctimas desde 2011
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El número de víctimas por artefactos explosivos improvisados o fabricados de forma casera y alojados en coches-bomba o chalecos de terroristas suicidas ascendió a 39.717 muertos o heridos entre 2011 y 2015 en 21 países, de los que el 79% (31.447) eran civiles.
Así se desprende de un informe de Acción sobre la Violencia Armada (AOAV, en sus siglas en inglés), una ONG afincada en Londres que trabaja para reducir la incidencia y el impacto de la violencia armada en el mundo.
El informe, al que tuvo acceso Servimedia, indica que las armas explosivas utilizadas en la guerra no convencional, principalmente por guerrilleros y terroristas, mataron o hirieron a 188.325 personas entre 2011 y 2015 en un total de 110 países y territorios, de las que 14.565 (el 77%) eran civiles y el resto, personas armadas. Iraq, Siria, Pakistán, Afganistán y Yemen son las cinco naciones con el mayor número de víctimas.
La AOAV diferencia ataques por lanzamientos aéreos, armas terrestres (granadas o misiles balísticos) y artefactos explosivos improvisados.
En cuanto a los artefactos explosivos improvisados, un 19% están catalogados como atentados suicidas, que causaron 39.717 víctimas, lo que representa un 38% de todos los muertos y heridos por este motivo. Cinco de los 10 peores incidentes ocasionados por armas explosivas en el último lustro fueron acciones suicidas.
Además, el año pasado hubo más de 10.000 víctimas por atentados suicidas, la cifra más alta de los últimos cinco años.
Por otro lado, el informe indica que el 91% de los muertos y los heridos por armas explosivas en zonas densamente pobladas eran civiles, en comparación con un 33% en los lugares no poblados.
(SERVIMEDIA)
07 Ago 2016
MGR/gfm