El primero en recibir este texto de 55 páginas, titulado ‘Programa para el gobierno de España’, fue el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. Rajoy le entregó el documento en mano durante la entrevista de hora y 20 minutos que mantuvieron esta mañana en el Congreso de los Diputados.

Se trata de un compendio de todo lo que los populares han defendido desde diciembre, en el que se incorporan las 26 medidas que resaltaron de cara al 26-J, además de las conclusiones de las convenciones que ha celebrado el PP entre enero y mayo.

También se incluyen los cinco pactos del PP sobre empleo, reforma fiscal, educación, asuntos sociales y fortalecimiento institucional, pero con más detalle. No obstante, Rajoy reconoció que en la entrevista con Sánchez no habló de “propuestas concretas”, pese a haberle hecho entrega personalmente de dicho documento.

“PUNTO DE NEGOCIACIÓN Y DIÁLOGO”

Fuentes populares explican que en este informe se recogen las propuestas que el equipo de Mariano Rajoy considera necesarias y en las que se puede coincidir con otras fuerzas políticas.

“Constituye una base sobre la que acordar, un punto de negociación con otros grupos políticos y abierto al debate y al diálogo”, reseñan.

El jefe del Ejecutivo en funciones apuntó esta mañana que se trata de una propuesta basada en los valores constitucionales, que insiste en el “consenso del proyecto europeo que compartimos la mayoría de los españoles” y centrada en los retos del futuro a los que hay que dar respuesta, como el terrorismo yihadista, entre otras cuestiones como la educación o la agenda digital.

“Es una propuesta que incide y atiende aquellos aspectos en los que yo creo que hay mayor consenso en el conjunto de la sociedad española”, argumentó Rajoy, al tiempo que añadió que se trata de una “propuesta moderada”. “Estamos en época de búsqueda de consensos y acuerdos”, apostilló.

Acuerdos que se presentan complicados tras la negativa expresada hoy por el líder socialista a facilitar una investidura del líder del PP. Por su parte, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, anunció esta mañana la abstención de su partido en la segunda votación de investidura de Mariano Rajoy, que pidió que imiten otros partidos, especialmente el PSOE, para poner en marcha la legislatura.

A este respecto, fuentes populares consideran que la actitud del líder de la formación naranja puede ir matizándose a lo largo de los días y creen que un mayor acercamiento del PP con Ciudadanos podría ayudar a ejercer presión sobre el PSOE, formación en la que los populares depositan la responsabilidad de evitar con su abstención, parcial o total, la convocatoria de unas terceras elecciones.