Picardo dijo que "a pesar del ruido que seguro hará nuestro país vecino", en referencia a España, "el Gobierno de Gibraltar confía en el compromiso del Gobierno británico de no participar en conversaciones o en conversaciones sobre conversaciones, de ahí su doble compromiso, contra la voluntad expresa del pueblo de Gibraltar".

Asimismo, afirmó con rotundidad que "Gibraltar nunca pagará el precio de la soberanía para acceder a un mercado. Gibraltar nunca será español, ni parcial ni totalmente. Por lo que pido a todos nuestros ciudadanos que ignoren estos ruidos".

Picardo dijo que el trabajo de su Gobierno durante los próximos meses se se centrará en reorientar y proteger la economía y en el mantenimiento de la libre circulación de personas, servicios y capitales en toda la UE para Gibraltar, deseo que ya ha comunicado a las autoridades británicas para que lo tengan en cuenta en las futuras negociaciones con la Unión Europea.

Recordó que los ciudadanos del Peñón se pronunciaron en el referéndum a favor de la permanencia en la UE, un 96% apoyaron esta opción, por lo que confió en que el Gobierno de Reino Unido no ignore este "mandato" y ayude a Gibralta a "mitigar el impacto negativo de la salida de Europa, aunque también nos centraremos en aprovechar los aspectos positivos que de esto se deriven".

Picardo también adelantó que mantendrá contactos con los líderes de otros "territorios británicos de ultramar" para trabajar conjuntamente en la búsqueda de propuestas que les beneficien.