Investigadores españoles someten un liquen de Guadalajara a radiación extraterrestre

MADRID
SERVIMEDIA

Un equipo de investigadores del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) han sometido a radiación extraterrestre durante 15 meses a una especie de liquen vagante (Circinaria gyrosa), que crece en la provincia de Guadalajara, a través del experimento Biomex, que analiza qué organismos son más resistentes en el espacio.

La nave Soyuz 45 ha traído de vuelta a la Tierra la plataforma Expose R2 que, entre otros experimentos, contiene el Biomex, en el que participa el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), junto con varios organismos nacionales (UCM, IGEO, CSIC-IRNAS) y que ha contado con financiación del Ministerio de Economía y Competitividad.

El experimento Biomex ha permanecido durante 15 meses en la Estación Espacial Internacional (ISS) y el INTA ha participado en él aportando una especie de liquen vagante, el Circinaria gyrosa, que crece en la provincia de Guadalajara, y que, en anteriores experimentos ha demostrado una alta capacidad de supervivencia en el espacio y tolerancia a condiciones simuladas de Marte.

El experimento Biomex ha estado expuesto directamente a la radiación extraterrestre (radiación UV intensa y radiación cósmica) desde noviembre de 2014 y hasta febrero de este año, cuando fue retirado del exterior de la ISS. El fin del experimento es estudiar la capacidad de resistencia de moléculas orgánicas, como pigmentos y componentes celulares, proteínas y ADN, en el espacio y en condiciones ambientales simuladas de Marte, y ver cuál es su máximo nivel de estabilidad en esas condiciones.

Otro de los objetivos es identificar qué organismos pueden ser más resistentes para formar parte de sistemas de soporte de vida en el espacio, tanto en naves espaciales como en futuras bases en la Luna o en Marte.

Las bandejas con las muestras de Biomex y el resto de experimentos están ya en Munich, en las instalaciones de la empresa Kayser-Trede, donde se realizará la desintegración y comenzará el análisis de los resultados por parte de los organismos responsables. Los biomarcadores identificados serán incluidos en una base de datos universal, que servirá de premisa para la búsqueda de vida en nuestro sistema solar.

Esta investigación persigue aportar nuevos conocimientos al origen, evolución y posible transferencia interplanetaria de organismos en el universo. Además, misiones futuras, como 'ExoMars' de la Agencia Espacial Europea (ESA) se beneficiarán de estos datos.

(SERVIMEDIA)
25 Jun 2016
ISP/gja