En un comunicado, la OCU Explica que aunque la reventa ambulante esté prohibida, la legislación es antigua y no contempla expresamente la prohibición de la reventa por Internet, situación aprovechada por numerosos sitios web y que es fuente de problemas para los consumidores.

Por ello, esta organización de consumidores va a iniciar una campaña de recogida de firmas con objetivo de propiciar un cambio normativo, que proteja a los consumidores ante estos abusos.

La OCU advierte de que en muchas ocasiones estos sitios web donde se revenden entradas adquieren un nombre de dominio para dar la impresión a los consumidores de tratarse de un punto oficial de venta, lo que puede llevar a engaño.

Como consecuencia, el consumidor se encuentra con que paga más dinero y en ocasiones no recibe la entrada en cuestión o se les niega el acceso a la sala de conciertos u otros eventos.

“La misma historia se repite continuamente: miles de consumidores buscan en Internet una entrada para un concierto determinado; hacen clic en uno de los primeros sitios que el buscador ofrece; y acaban por pagar la entrada mucho más cara que el precio oficial”, denuncia la OCU.

Por último, recuerda que varios países ya han regulado la reventa en Internet con ciertas condiciones de protección para los consumidores. Entre otras medidas adoptadas, la empresa organizadora del evento debe otorgar su consentimiento expreso para la reventa y el sobreprecio de las entradas no puede superar cierto porcentaje, normalmente no más de un 20%.