En un mitin en la Caseta de los Jardinillos de Albacete ante más de 3.000 espectadores, García-Page comenzó diciendo que el toreo natural es por la izquierda, pero que para triunfar hay que torear con las dos manos, “y eso lo hace estupendamente el PSOE”. Auguró que “no va a haber sorpasso, va a haber sorpresa”, y recordó que a él las encuestas de las elecciones autonómias de 2015 le daban mucho peor de lo que dan ahora al secretario general socialista, Pedro Sánchez.

Bromeó que la actitud del presidente del PP, Mariano Rajoy, de no presentarse a la investidura si no tiene apoyos es como la de los niños que si no haces lo que quieren “no te ajuntan”, y deseó la dimisión del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, cuya búsqueda de datos comprometedores de líderes catalanes le “repugna tanto” que no le importa si las grabaciones se han filtrado ahora en favor del independentismo.

Page habló “claramente” a los votantes que se fueron a Podemos, interpretando que “son en el fondo IU”, y que su progresión de votos desvela que muchos socialistas les apoyaron en diciembre para que Sánchez fuera presidente del Gobierno e hiciera “cambios por las buenas”, porque “por las malas no se hacen”.

Se dirigió también a los votantes de IU que se negaban a la “absorción” y que tienen “una ocasión de oro para ajercer un voto responsable”, e incluso a los votantes “responsables” del PP, a quienes reclamó un voto moderado “contra los extremistas”, entre los cuales incluyó al Partido Popular, “muy radical”, como lo demostró su oposición a los gobiernos de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero.

Finalmente, el presidente pidió el voto y, "en nombre de todos, ayuda", porque "la cosa está seria, no creo que haya un momento en los últimos años donde España se la juegue tanto". A su modo de ver, la única opción sensata y responsable es el PSOE, por lo que pidió a los espectadores que se pregunten: "Qué presidente necesita este país?" El auditorio respondió, como se esperaba: "¡Pedro, Pedro, Pedro!"

El cabeza de lista del PSOE al Congreso por Albacete, Manuel González Ramos, recordó que este recinto fue un talismán antes de las últimas elecciones autonómicas que auparon a la Presidenciae a Emiliano García-Page, y expresó su agradecimiento hacia él y hacia su predecesor José Bono, “nuestro presidente, el de toda la vida”.

Denunció que el PP de Mariano Rajoy ha hecho mucho daño a la gente y no se merece continuar, y, en contestación a Podemos, se declaró “orgulloso de esta casta socialista” que ha surgido de raíces humildes, y su fundador, el Pablo Iglesias “auténtico, que fue fiel a sus principios”. Y concluyó: “De sorpasso nada. Zarpazo. Zarpazo es lo que le vamos a dar a la derecha”, llamando a sus oyentes a escribir la historia el domingo y no dejar que nadie lo escriba por ellos, porque “la victoria la tenemos dentro. Sólo tenemos que ir a votar”.

La cabeza de lista al Senado, Matilde Valentín, se declaró orgullosa más que nunca del partido, de la gente que murió por defenderlo y de los gobernantes que “dieron la vuelta a España como un calcetín”. Frente al PSOE, dijo, hay dos extremos: un PP que le llega la corrupción al cuello y ha causado mucho dolor y trata de meter miedo de cara a las elecciones.

Y, por otro lado, Podemos, que “intenta apropiarse de nuestros valores, nuestros sentimientos, nuestra ideología y nuestros gobernantes, que no tiene rubor en cambiarse la careta cada día y tiene mucho rencor al PSOE”. Frente a ambos extremos, arengó: “Tenemos que ir a votar, llevarnos a los padres, a los hijos, a los nietos. Es absolutamente fundamental para el Partido Socialista”.