Más de 700 civiles heridos por combates en Yemen dos meses después del alto el fuego

- Según Médicos Sin Fronteras

MADRID
SERVIMEDIA

Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció este miércoles que “los civiles siguen sufriendo los efectos de la violencia indiscriminada” dos meses después del alto el fuego en Yemen, puesto que las instalaciones y los hospitales apoyados por esta organización médico-humanitaria en el país han tratado a 1.624 personas con lesiones causadas por combates intensos en Taiz (suroeste del país), de los que más de 700 son civiles.

La escalada del conflicto comenzó cuando una coalición liderada por Arabia Saudí lanzó en la madrugada del 26 de marzo de 2015 los primeros bombardeos contra los rebeldes hutíes (chiíes aliados de Irán y partidarios del expresidente Ali Abdalá Saleh).

El pasado 10 de abril entró en vigor un alto el fuego después de que las hostilidades llevaran a 21,2 millones de personas (el 82% de la población) a necesitar ayuda humanitaria.

MSF señaló que Taiz ha vivido “algunos de los combates más feroces” desde que se iniciara la contienda. “Sus ciudadanos han sufrido regularmente los efectos de los bombardeos aéreos y de las explosiones de bombas y proyectiles. También han sido víctimas de la explosión de minas terrestres y del fuego de francotiradores. Los combates y los bombardeos se dan en las zonas más densamente pobladas de la ciudad, pero, a pesar de ello, ninguna de las partes en conflicto parece estar haciendo un esfuerzo por evitar que haya bajas entre los civiles”, añadió.

Salah Dongu’du, coordinador de MSF en Taiz, indicó que esta organización recibió a 122 heridos el pasado 3 de junio, la mayoría de ellos víctimas del impacto de un misil que alcanzó un concurrido mercado de la ciudad.

“A esto se añade que otras 12 personas llegaron ya muertas o con heridas tan graves que no pudimos hacer nada por ellos y murieron poco después. La gran mayoría eran civiles. Apenas 24 horas después, otras 135 personas llegaron heridas a causa de los nuevos combates. Aquí no hay tregua", explicó.

MSF indicó que el impacto del conflicto afecta a todos los residentes de Taiz por igual. “Es difícil encontrar a alguien que no haya perdido a algún familiar o amigo, o que no se haya quedado sin su hogar o sin sus medios de subsistencia. Todo el mundo vive bajo una sensación de miedo constante, pero no les queda otra opción que seguir intentado salir adelante. Mientras tanto, la situación humanitaria sigue deteriorándose, el acceso a la atención sanitaria está cada vez más limitado, no hay electricidad, las calles se llenan de basura, y los alimentos y otros productos básicos sólo están disponibles a unos precios completamente desorbitados”, recalcó.

Will Turner, coordinador general de MSF en Yemen, relata un episodio que ha vivido recientemente: “Hace poco entré en una de las salas de urgencia de uno de nuestros hospitales. Delante de mí había dos niños pequeños que yacían en dos camas; la una junto a la otra. El niño había sido alcanzado por una bala en el cuello cuando salía de la mezquita; la chica que estaba a su lado tenía el estómago destrozado por el impacto de una bala que le alcanzó mientras esperaba para recoger agua. Y no es un hecho aislado, este tipo de historias trágicas ocurren a diario en Taiz. Para nosotros, como organización médica humanitaria, esto resulta completamente inaceptable".

MSF llamó a todas las partes en conflicto en Yemen a que tomen “de una vez por todas” las medidas necesarias para proteger a la población civil y pidió a todos los actores que tienen alguna implicación en esta situación, tanto a los que están participando estos días en las conversaciones de paz de Kuwait como a los que no, que reduzcan el nivel de intensidad de los combates y faciliten en todo momento el acceso de ayuda humanitaria a Taiz.

(SERVIMEDIA)
15 Jun 2016
MGR/caa