Durante su intervención en un curso organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), patrocinado por BBVA en la UIMP de Santander, Ron admitió que España "continúa su fase expansiva, pese a que hay factores como la incertidumbre política que hace difícil que España crezca a un ritmo deseable".

En su opinión, la demanda interna continúa siendo el "principal motor" de la economía, mientras que la inversión empresarial acumula "tendencias positivas".

Ron arremetió contra las condiciones de financiación "ultralaxas" del Banco Central Europeo (BCE), que si se mantienen durante más tiempo de lo debido, generarán "elementos contraproducentes, si es que no los están generando ya".

El presidente del banco también mostró su preocupación por la elevada tasa de paro en España o el elevado endeudamiento del sector público.

Según advirtió, todos estos elementos, junto a las tensiones demográficas, "debilitan el sistema público de pensiones".

Para Ron, España "no puede estar en un escenario de bajos salarios para siempre", porque eso es contraproducente para la economía, si bien también advirtió de que el empleo fijo "desincentiva la movilidad laboral".

"España se enfrenta a un riesgo de sostenibilidad de la deuda a largo plazo y para ello hay que hacer reformas estructurales que mejoren la competitividad", dijo.

En relación con la volatilidad de los mercados de los últimos días, Ron reconoció que España es "muy vulnerable" a esta situación y tiene un "impacto real sobre la economía".

Con respecto a la evolución del precio de la vivienda, Ron recordó que algunos informes ponen de manifiesto que si se mantienen las condiciones, los precios seguirán subiendo, "aunque muy lejos de los momentos de la burbuja". Así, citó un informe según el cual la vivienda estaría "infravalorada" y se proyecta un crecimiento del 7% acumulado en tres años del precio.