Según informó la Policía, el detenido publicaba ofertas de automóviles de importación, que no tenía en su poder, en una conocida web de compraventa ‘online’ y solicitaba por ellos una señal a los compradores en concepto de adelanto.

En un primer momento, anunciaba los turismos a nombre de una empresa de la que era administrador. Posteriormente, constituyó una sociedad mercantil, en la que colocó a un testaferro a cambio de 500 euros que no tenía ninguna relación con la actividad delictiva, ocultando así su identidad en las negociaciones de venta.

A ello se suma que comenzó a utilizar una identidad ficticia utilizada en las negociaciones con las víctimas.

Las investigaciones comenzaron a principios del pasado mes de mayo, después de que se presentara una denuncia en la que el perjudicado informaba de que había sido víctima de una estafa en la compra ‘online’ de un vehículo de importación. Tras pagar una señal en concepto de adelanto no volvió a tener noticias del supuesto vendedor.

Los investigadores comprobaron después que el supuesto vendedor tenía publicados en Internet más de 200 anuncios de venta de vehículos, en los que figuraban diversas empresas que no tenían actividad aparente, sino únicamente un domicilio social en Toledo donde ni siquiera existía una oficina o local en donde se expusiera turismo alguno.

Posteriormente, y gracias al análisis de la información bancaria facilitada por las víctimas, los investigadores averiguaron que el detenido era titular de cuatro cuentas bancarias diferentes, en las que se habían recibido numerosas transferencias, todas ellas procedentes de estafas y por un importe superior a los 200.000 euros en efectivo.