Desarticulada una red de "correos humanos" que ingerían hachís en Marruecos para llevarlo hasta Madrid

- Han sido detenidas 15 personas e intervenidas 1.510 "bellotas" con un peso total de 8.705 gramos

MADRID
SERVIMEDIA

La Policía Nacional ha detenido a 15 traficantes de droga de origen rumano dedicados a introducir en España hachís procedente de Marruecos. La organización se servía de "correos humanos" que ingerían la sustancia estupefaciente, en forma de "bellotas", en el país norteafricano y la trasladaban en el interior de sus cuerpos hasta su expulsión en Madrid.

Según informó este miércoles la Jefatura Superior de Policía de Madrid, los agentes han intervenido 1.510 "bellotas" con un peso bruto de 8.705 gramos. Entre los detenidos

está el cerebro del grupo, el conductor de la furgoneta que transportaba a los "muleros" hasta Andalucía y trece de estos "correos humanos".

La investigación comenzó cuando los agentes del Grupo de Estupefacientes de la Comisaría de Móstoles, en Madrid, descubrieron que un joven rumano podría estar captando personas de su mismo país con el fin de reclutarlos para que introdujeran en España hachís proveniente de Marruecos.

Los investigadores identificaron a esta persona, presunto responsable y cerebro de la organización en España. Este individuo frecuentaba dos domicilios, uno en Móstoles y otro ubicado en el distrito madrileño de Usera-Villaverde, en los que el trasiego de jóvenes era constante.

Muchos de estos jóvenes, cuando salían de los pisos, se introducían precipitadamente en una furgoneta estacionada a la entrada. A continuación, el vehículo abandonaba el lugar en dirección a Andalucía, mientras que el jefe, desde su turismo, intentaba detectar la presencia policial por las inmediaciones.

Los investigadores averiguaron que esta furgoneta retornaba a Madrid, por lo que se establecieron diversos dispositivos de vigilancia y seguimiento. El vehículo fue interceptado en el centro de la capital y los agentes constataron que la identidad de varios de sus ocupantes coincidía con las de los jóvenes que habían iniciado el viaje con destino a Algeciras y, posteriormente, a Marruecos.

Ante la sospecha de que pudieran portar en su organismo sustancia estupefaciente fueron sometidos a pruebas radiológicas, dando como resultado que los ocho pasajeros alojaban gran cantidad de "bolas" en el interior de su cuerpo. Tras la expulsión de dichas "bellotas", se comprobó que se trataba de hachís.

DROGA EN CAJAS FUERTES

Al día siguiente, los agentes registraron el domicilio de Madrid, donde arrestaron a otros cinco jóvenes. En la vivienda se encontró sustancia estupefaciente similar a la que transportaban los detenidos el día anterior, parte de la cual se encontraba oculta en varias cajas fuertes, entre otros escondites.

Unas horas después fue arrestado en Móstoles el cerebro de la organización, único miembro del grupo al que le constaba una detención por un delito contra la salud pública cometido a mediados del año 2007. En esta misma localidad, los agentes llevaron a cabo otros dos registros de viviendas del grupo.

Este individuo contactaba con distintas personas en Rumanía que reclutaban jóvenes con el pretexto de trabajar en la construcción, una actividad "pantalla" de la organización. Una vez en España, les alojaban en un piso de Usera y les retiraban el pasaporte, instándoles a trabajar como correos de la droga.

Los jóvenes viajaban continuamente en la furgoneta hacia Tarifa y Algeciras (Cádiz), y de ahí a Marruecos. Tras ingerir la droga, proporcionada por otros miembros de la organización asentados en el país vecino, regresaban a Madrid, donde expulsaban el hachís que portaban en su cuerpo.

La organización extremaba notablemente las medidas de seguridad. Procuraban que las "mulas" salieran de Marruecos a distintas horas y cambiaban el modo de transporte aunque antes hubieran viajado de forma conjunta. Además, los pasajeros de un vehículo no tenían por qué coincidir durante todo el trayecto, tratando así de desviar la atención de la policía.

(SERVIMEDIA)
31 Mar 2010
NLV/caa