Sanz hizo esta consideración durante una rueda de prensa celebrada esta tarde con motivo de la firma de este acuerdo con el Estado, cuyo convenio se firmará el día 9 en Pamplona por parte del ministro de Fomento, José Blanco, y responsables de ADIF.

Según el presidente regional, en este acuerdo se cumplieron las tres condiciones determinadas por el Gobierno navarro: que las obras empezaran en 2011 y acabasen en la comarca de Pamplona en 2015, que se tratase de un convenio económico y que la financiación se afronte por parte del Gobierno navarro durante dos años y su coste para el Ejecutivo autonómico no supere los 60 millones de euros (se reducirá finalmente a unos 45 millones).

La deuda que se emitirá y la financiación se contabilizará como deuda del Estado y no rebasará los límites comprometidos en el marco del Consejo de Política Fiscal y Financiera.

En el convenio se recoge la construcción por ADIF de la estación de ferrocarril, la dirección de proyectos estará a cargo del Gobierno de Navarra y la superestructura será ejecutada por ADIF.

Sanz considera que las comparaciones con el caso del AVE al País Vasco "no vienen a cuento porque son dos convenios diferentes y los momentos económicos y los costos no son los mismos".

Finalmente, el presidente autonómico matizó que la calificación de Navarra con la "triple A" les permitió colocar su deuda más barata que ninguna otra comunidad autónoma española y les posibilita también acceder al crédito más barato que en el caso de otras regiones.