Así se pronunció el ministro, en declaraciones a los periodistas, tras la inauguración del acto ‘España Construye’ organizado por Marca España dentro de una campaña de difusión para poner en valor el “liderazgo” español en el sector de la construcción en todo el mundo.

El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero se encuentra actualmente en Venezuela tratando de mediar entre el Gobierno y la oposición venezolana con el objetivo de frenar la tensión entre ambos y, de este modo, evitar un choque de trenes entre el poder Ejecutivo y el poder Legislativo en el país caribeño.

De hecho, Zapatero ha mantenido una reunión por sorpresa con el líder opositor venezolano Leopoldo López, quien se encuentra encarcelado desde febrero de 2014 en el penal de Ramo Verde.

En ese sentido, el jefe de la diplomacia española dijo desconocer si Zapatero ofreció en ese encuentro a López su libertad a cambio de que la oposición venezolana, que controla la Asamblea Nacional del país, frene sus intenciones de convocar un referéndum revocatorio que podría suponer que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, abandone el poder.

Margallo dijo que es únicamente responsable de lo que el Gobierno “ha dicho y mantiene”: que “prime y que se respete la Constitución y los mecanismos constitucionales, incluido el revocatorio” y que se respeten los derechos humanos”.

Esta condición implicaría la liberación de los presos políticos, que, dijo, se encuentran encarcelados “sin motivo conocido y con procedimientos realmente adulterados”.

El ministro también reiteró la necesidad de que en Venezuela se desarrolle un diálogo entre Gobierno y oposición que permita la “reconciliación nacional”, que es la “condición inexcusable” para sacar al país caribeño de la “crisis económica y humanitaria en que se encuentra”.

Por otro lado, Margallo confirmó que habla “prácticamente a diario” con Zapatero, quien está teniendo una “postura extraordinariamente elegante” al darle cuenta “por teléfono” de cualquier “avance o reunión” que se produce en Venezuela. “Esto es lo que debe hacer cualquier político que vaya al exterior”, remachó.