Así lo manifestó el portavoz del PP en el Ayuntamiento barcelonés, Alberto Fernández Díaz, en declaraciones a Servimedia, después de que el Consistorio plantease la posibilidad de comprar el local del ‘banco expropiado’ para mantener su actividad, aunque finalmente esto ha sido descartado por el precio “desorbitado".

“Reclamamos que se rechace la compra por la vía directa o por la vía indirecta, es decir a través de entidades y asociaciones que se financian con los ingresos del propio Ayuntamiento”, dijo tajantemente el dirigente popular.

A su juicio, permitir la compra de este local para dar una salida a la situación que se ha vivido en el barrio de Gràcia con los okupas sería un “agravio” para los vecinos “que cumplen las normas y no protagonizan incidentes violentos”.

A este respecto, Fernández Díaz agregó que Colau, además de “ser permisiva con los okupas”, pretende “comprar la convivencia” adquiriendo un local y “cediendo al chantaje” de este colectivo.