Marcas como Garanimals, de Garan, que ofrece puzles y otros juegos fabricados con madera de bosques sostenibles, y los peluches confeccionados con botellas de plástico reciclado de la firma Dandee International de Nueva York, han registrado un importante incremento de sus ventas en la cadena de hipermercados Walmart.

Amazon.com, el principal portal de Internet de ventas en EEUU, ha visto crecer la demanda de juguetes con menor impacto medioambiental, entre ellos los de bambú y la plastilina vegetal.

Para hacer frente al aumento de la demanda de juguetes ecológicos, algunas jugueteras han optado por la compra de las compañías que los fabrican, este es el caso Wham-O, que ha adquirido Sprig Toys, empresa que produce juguetes sin pintura a partir de madera y plástico reciclado, y en los que las pilas que accionan luces y sonidos se han sustituido por mecanismos de cuerda.

Por su parte, empresas como Mattel y Hasbro, dos de las principales jugueteras estadounidenses, podrían incorporar en breve marcas eológicas, y ya han adoptado algunas medidas para mejorar su sostenibilidad, como la reducción del uso de embalajes y el uso de un mayor porcentaje de materiales reciclados en ellos.