Según informa Renfe, para corregir el concurso va a elevar a base 35 los 34 puntos valorables, los mismos que en el anterior proceso salvo el anulado por el Tacrc, y ofrecerá un plazo de 60 días para recibir las nuevas ofertas desde la entrega del nuevo pliego.

La cláusula anulada era la que premiaba la fabricación en España de los vehículos, cláusula que computaba un punto de 35 en la valoración técnica final.

Renfe recibió ofertas de Alstom, Siemens, Talgo y CAF el pasado 17 de mayo, cuatro de los principales fabricantes de material rodante para el suministro de hasta 30 trenes de alta velocidad.

El contrato, que puede alcanzar los 2.642 millones de euros contempla también el mantenimiento de los trenes por un periodo de 40 años. Renfe adquirirá un mínimo de 15 trenes, ampliables en hasta tres encargos adicionales de cinco convoyes adicionales.

Tras la devolución de estas ofertas, todas las empresas que superaron la primera fase del proceso quedan invitadas a presentar oferta. Además de las que ya lo hicieron, estaban invitadas la canadiense Bombardier, la que impugnó el concurso, y la japonesa Hitachi.

La nueva flota de Renfe incorporará las últimas tecnologías en material rodante. Los nuevos trenes serán los más rápidos de la flota (320 kilómetros por hora), los más eficientes en términos de consumo de energía y con conectividad 100% para el viajero, lo que permitirá una oferta individualizada de servicios y entretenimiento a bordo.

Deberán contar con un mínimo de 400 plazas, dos clases, cafetería, instalación para la restauración en plaza, sistemas independientes por coches (iluminación, climatización), aseos, sistema wifi y ser 100% accesibles.