Según declararon a Servimedia, “no pretendemos que los empleadores se conviertan en empresarios, porque sabemos que muchas veces no lo son”, pero este es un problema que “afecta a toda la sociedad” y del que el Estado tiene que hacerse cargo, añadieron.

Por ello, proponen que se habilite un fondo especial o se creen los mecanismos necesarios para poder cotizar a la Seguridad Social, “como cualquier asalariado”, aseguran, y acabar así con la precariedad laboral, la no remuneración de vacaciones y bajas y con la discriminación del trabajo doméstico, que tradicionalmente ha correspondido a la mujer, denuncian.

La marcha concluirá en la madrileña Puerta de el Sol y en ella también se reivindicarán ”mejoras de los derechos de las trabajadoras domésticas sin papeles”.

“En concreto, pedimos flexibilizar la fórmula del arraigo”, para acabar con su situación de ilegalidad, señaló la portavoz, ya que esto “provoca que muchas veces acepten peores condiciones laborales y situaciones propias de esclavitud”, añadió.

Por último, las manifestantes reclamarán “que se visualice y dignifique el trabajo que realizamos, que cotidianamente sostiene miles de hogares en este país”.