Fuentes de la Audiencia Nacional señalaron que en el marco de la investigación no se ha apreciado comportamiento doloso alguno por parte de los agentes o de cualquiera de los implicados en el traslado de los detenidos.

La principal conclusión que se ha extraído de la investigación, iniciada por orden del presidente de la Audiencia Nacional, Ángel Juanes, es que la culpa la tuvo el tamaño del furgón en el que fueron trasladados los detenidos, que imposibilitó que los arrestados quedasen fuera del alcance de las cámaras.

Aún así, el incidente ha servido para que la Audiencia Nacional haya perfeccionado el procedimiento de traslado de los detenidos con el objetivo de evitar que la situación se vuelva a repetir.

Los hechos tuvieron lugar el 30 de octubre de 2009, cuando los primeros arrestados en la operación contra la trama de corrupción política en Cataluña fueron trasladados a la Audiencia Nacional para declarar ante el juez Baltasar Garzón.

Entre los arrestados se encontraban los ex altos cargos de la Generalitat en la etapa de CiU Lluís Prenafeta y Macià Alavedra, el alcalde socialista de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), Bartomeu Muñoz, así como el presunto cerebro de la trama corrupción, el empresario Luis García Sáez, alias “Luigi”.