Con este sistema los transportistas de UPS sólo se desplazarán a las oficinas de sus usuarios cuando reciban un aviso de recogida en sus ordenadores portátiles, que las empresas les podrán enviar a través de varios portales de Internet que la compañía ha creado para este fin.

De ese modo, UPS ya no realizará rutas diarias con paradas en cada empresa cliente, como venía haciendo hasta ahora.

La empresa prevé que la adopción de dicho sistema podría permitir un ahorro de unos 3 millones de litros de combustible al año y una reducción de las emisiones de CO2 en torno a 7.800 toneladas.

UPS también ofrece a sus clientes un programa para la compensación de las emisiones de dióxido de carbono generadas por sus envíos, cuyo coste va desde los 4 céntimos de euro por paquete para envíos terrestres, a los 20 céntimos para los aéreos.