La sentencia explica que la absolución del delito de maltrato es un cambio de circunstancias a los efectos del artículo 90.3 del Código Civil, y debe valorarse ante la petición de custodia compartida.

El recurrente solicitaba una modificación de las medidas acordadas en la sentencia de divorcio de su mujer en 2011, que atribuyó a esta la custodia de la hija menor de edad, ya que en ese momento existía una denuncia de la madre que dio lugar a la incoación de causa penal.

De esta manera, el reparto del tiempo, que es semanal, se hará atendiendo a principios de flexibilidad y al mutuo entendimiento entre los progenitores y cada uno podrá tener a su hija en los periodos de vacaciones el 50% del tiempo.

"CAMBIO SIGNIFICATIVO"

El Alto Tribunal estima el recurso de este padre “en interés del menor al apreciarse un cambio significativo de las circunstancias que se tuvieron cuando se adoptó el anterior sistema de custodia, en el que el padre tenía un régimen de visitas los martes, jueves y fines de semana alternos”.

Asimismo, ven esencial para este cambio que el padre fuera absuelto del delito de maltrato y que, con anterioridad, se hubieran archivado otras diligencias penales en las que la mujer le denunciaba por abuso contra la menor.

Hasta en dos ocasiones, dos psicólogas –la primera, del juzgado en 2010 y la segunda, propuesta por el padre en 2014- elaboraron diversos informes en los que, tras escuchar a la niña, aconsejaban el sistema de custodia compartida.

Además, determinan que la edad de la menor, que tiene ahora 10 años, "constituye en sí mismo una variable que aconseja un contacto más intenso con los dos progenitores", y determinan que la modificación de la jurisprudencia considera la custodia compartida como el sistema normal, salvo excepciones”.