MSF alerta del aumento de mujeres subsaharianas violadas en su viaje a Europa
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció hoy que cada vez más mujeres subsaharianas que salen de sus países de origen para llegar a Europa sufren episodios de violencia sexual en su trayecto migratorio.
Así figura en el informe “Violencia sexual y migración. La realidad oculta de las mujeres subsaharianas atrapadas en Marruecos de camino a Europa”, presentado hoy en Madrid y que recoge los testimonios de 63 mujeres atendidas por MSF en Rabat y Casablanca (Marruecos) entre mayo de 2009 y el pasado mes de enero, que habían salido de países como la República Democrática del Congo o Nigeria.
Según el informe, un 39% de las mujeres reconoció haber sufrido algún tipo de violencia sexual tanto desde sus países de origen como durante su periplo hasta llegar a Marruecos, cuando este porcentaje era del 14,3% en 2008 y del 23,5% en 2005.
El responsable de Operaciones de MSF en Marruecos, Alfonso Verdú, afirmó en una rueda de prensa que un 29% de las mujeres consultadas fueron víctimas de violaciones en sus países de origen, sobre todo la República Democrática del Congo y Nigeria, y un 45% sufrieron “uno o varios episodios de violencia sexual durante el trayecto”.
Además, apuntó que las mujeres tienen entre 2 y 40 años, un 21,5% de ellas son menores de edad y un 10% no habían cumplido los 10 años.
Verdú aseguró que en 2009 hubo “una tendencia alarmante” de aumento de mujeres subsaharianas violadas y subrayó que “es la punta del iceberg de un fenómeno que está escondido”.
MUJERES MUY JÓVENES
Por su parte, la asesora de Asuntos Humanitarios de MSF en Marruecos, Concha Badillo, comentó los “factores de vulnerabilidad” de estas mujeres, que huyen de matrimonios forzados, de un conflicto armado o de la violencia doméstica.
Badillo señaló que se trata en su mayoría de “mujeres muy jóvenes que salen de su casa muchas veces sin dinero” y que para llegar a Europa “algunas pagan con dinero y otras pagan con su cuerpo”.
Indicó que “lo normal” es que estas mujeres sean explotadas sexualmente en un trayecto en “pick-up” que dura generalmente unos tres meses y en el que viven “situaciones de mucha angustia, pasan mucho miedo y viven un gran estrés”.
Badillo recalcó que hay “poquísimos” casos de mujeres que han sufrido un solo episodio de violencia sexual y añadió que al llegar a Marruecos “no encuentran una asistencia especializada” para atenderlas, tanto desde el punto de vista psicológico como legal.
Como conclusión, Verdú apostilló que “mientras que el Gobierno de Marruecos debe dar una respuesta integral a la problemática de violencia sexual, la UE tiene que asumir las consecuencias en cuando a sus políticas de asilo, que no son sino el aumento de la violencia en general y específicamente de la violencia sexual a las mujeres vulnerables”.
(SERVIMEDIA)
25 Mar 2010
MGR/gja