Preguntados en rueda de prensa antes de participar en los actos del Primero de Mayo en Madrid sobre la advertencia del líder de UGT en Cataluña, Camil Ros, de que se podría convocar una huelga general en otoño, los dirigentes confederales de ambos sindicatos instaron a esperar a ver el resultado de los próximos comicios.

“Nunca se puede descartar la movilización ni la más contundente que tenemos a nuestro alcance”, dijo Álvarez en referencia a la huelga general, pero abogó por “ir viendo cómo se desarrollan los acontecimientos” ya que considera que “hay muchas posibilidades de encauzar los conflictos”.

Así, defendió que este Primero de Mayo “representa un punto de inflexión” y advirtió de que “los gobiernos y las patronales deben ser conscientes, así como los partidos políticos a la hora de proponer medidas, que los problemas de los trabajadores no pueden esperar”.

En una línea similar, Toxo señaló que, antes de llegar a otoño, “hay un hito importante”, que es la convocatoria de elecciones. “Si a partir de ahí se puede y se conforma un gobierno de cambio, el escenario evidentemente podría cambiar”, agregó.

En su opinión, el momento de la elaboración de los próximos Presupuestos Generales del Estado, que debería tener lugar en otoño, supondrá “un escenario complejo”, ya que insistió en que “España necesita más tiempo y una mayor flexibilidad” en sus compromisos con Bruselas, por lo que avanzó que “el movimiento sindical estará muy atento".

Por esta razón, concluyó asegurando que “depende de cómo se aborden estas cuestiones”, las organizaciones sindicales tomarán una decisión sobre la huelga general, aunque añadió que “ya diremos en su momento qué corresponde hacer”.