Según informó la entidad financiera, de esta forma, BBVA completa la operación de cédulas "de mayor tamaño realizada por una entidad financiera española desde el inicio de la crisis".

La emisión ha contado con la participación de más de 125 inversores institucionales y con una significativa demanda extranjera de más 2.500 millones de euros.

"El éxito de la operación responde a las fortalezas de BBVA así como a su reconocida calidad crediticia", sostiene la entidad que preside Francisco González.

La colocación se ha completado en un tiempo récord, obligando a cerrar el libro de órdenes tan sólo dos horas después de su apertura.

El libro de órdenes ha alcanzado un importe total final de 3.000 millones de euros y ha contado con la participación de más de 125 inversores europeos, fundamentalmente fondos de inversión, bancos centrales y compañías aseguradoras.

Los inversores extranjeros han supuesto el 85% de la demanda, lo que demuestra una vez más el respaldo de éstos hacia uno de los créditos más sólidos del sistema financiero a nivel mundial.