Casi la mitad de esa cifra correspondió a ciudadanos de Siria (166.109), seguidos de originarios de Eritrea (27.600, el 8%) y de Iraq (23.700, el 7%).

Por países, Alemania fue el Estado miembro que dio más reconocimientos, 148.200 (un 212% más que en 2014), por delante de Suecia (34.500), Italia (29.600), Francia (26.000), Reino Unido (17.900), Austria (17.800) y Holanda (17.000).

España atendió de forma positiva 1.030 solicitudes de asilo, 805 mediante protección subsidiaria y 220 con estatuto de refugiado. Por países de procedencia, 655 fueron sirios, 110 somalíes y 60 paquistaníes.

De las 330.350 solicitudes de protección atendidas en los Veintiocho, 246.175 se sustanciaron en la concesión de estatuto de refugiado (el 74% del total), 60.680 con protección subsidiaria (18%) y 26.500 con autorización para permanecer por razones humanitarias (8%).