En estos jornadas, organizadas por el Instituto de la Mujer y el Consejo eneral del Poder Judicial (CGPJ), jueces, fiscales, médicos y varias ONGs estudian reformas judiciales para atajar este problema.

"Lo más importante es conocer el seguimiento de las penas impuestas a los causantes de estas muertes, y las circunstancias en las que estas muertes anunciadas se producen", insitió Amalia Gómez.

"No puede ser que la última víctima, en Mallorca, hubiera denunciado a su marido 15 veces antes de fallecer", argumentó.

Pidió que en las jornadas se realice una valoració sincera y rigurosa de lo que está pasando y por qué, y dijo que "no tendremos una democracia sólida si siguen existiendo tantas mujeres sobre las que pesan la cultura histórica de la resignación".

PROMOVER REFORMAS

Por su parte, Enrique Arnaldo, vocal del CGPJ, que participó en el acto de inauguración, subrayó que el máximo órgano del poder judicial no es insensible a este poroblema y pidió que las jornadas den lugar a unas conclusiones sobre las que estudiar, trabajar y promover reformas legales. Los malos tratos son "un atentado real contra la paz y la democracia", e insistió y destacó el dato de que sólo un 5 por ciento de las mujeres maltratadas denuncian a sus maridos y ésto sólo en las zonas urbanas.

Anunció que los jueces visitarán las casas de acogida de mujeres maltratadas donde convivirán con ellas y conocerán 'in situ' la problemática y situación que rodea a estas personas.

Por su parte, la directora del Instituto de la Mujer, Concepción Dancausa, en su conferencia inauguralhizo un recorrido por la situación de las mujeres en las últimas decadas e insitió en buscar las causas de los malos tratos, controlar los efectos de éstos y encontar medidas para evitarlos.

"La muerte por malos tratos", señaló Dancausa, "son el asesinato encubierto que más muertes provoca en el mundo y ésto hay que evitarlo".