Según informó este lunes el Ministerio de Economía y Hacienda, la operación se inició el pasado mes de noviembre cuando la Agencia Tributaria analizó ciertas importaciones de mercancías que no eran comercializadas en el mercado interior en la misma proporción en que se importaban.

El pasado 25 de febrero llegaba al Puerto de Valencia, procedente de Buenos Aires, un buque de bandera liberiana con contenedores para su descarga. En el análisis de la mercancía descargada se detectó material sospechoso, procediendo a la comprobación física del envío en la zona aduanera antes de que fuese autorizada la entrega del mismo a su importador.

En el contendor se encontraron 240 cilindros de aluminio de interior hueco organizados en palés, con un peso total de 12.000 kilos, que estaban sellados en los extremos con tapas del mismo material, lo que hizo necesario utillaje especial para su apertura. En el interior de los cilindros había 480 kilos de cocaína de gran pureza.

Una vez dispuesta la mercancía sin la droga y lista para entregar a su importador, se detuvo al responsable de la recepción y distribución de la cocaína en España, en Manises (Valencia).

La persona detenida pasó a disposición judicial con el resto de diligencias policiales, habiendo sido acordada su prisión incondicional. La investigación sigue abierta y no se descartan más detenciones.