Rodríguez Zapatero, junto al presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, compareció en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros, celebrada esta vez en Sevilla y en la que se aprobó el proyecto de Ley de Economía Sostenible para comenzar su tramitación parlamentaria.

A la aprobación de ese proyecto de ley seguirá en las próximas semanas un plan de infraestructuras con financiación pública y privada, un plan de eficiencia y racionalización del sector público empresarial, un plan integral de impulso al vehículo eléctrico y la puesta en marcha de una comisión para incrementar la competitividad industrial.

Paralelamente a la llegada de ese proyecto de ley al Parlamento, el Gobierno enviará la próxima semana a los partidos políticos un documento de síntesis de los acuerdos alcanzados en las negociaciones de la comisión encabezada por la vicepresidenta segunda, Elena Salgado.

El presidente argumentó que en las reuniones celebradas en el Palacio de Zurbano se constataron “coincidencias suficientes” sobre medidas que pueden ser aplicadas inmediatamente para generar empleo y facilitar la recuperación económica.

Esas coincidencias se plasmarán en ese documento, a partir del cual el Gobierno presentará un decreto ley para su convalidación por el Parlamento, en un plazo que rondará las dos semanas.

Rodríguez Zapatero reiteró su voluntad de máximo consenso sobre ese documento, pero dejó claro que el Gobierno intentará sacarlo adelante haya o no respaldo del PP, al menos en lo concerniente a lo más urgente, es decir, la habilitación de créditos a través del ICO y el fomento de la rehabilitación de viviendas.

En este sentido, el presidente expresó su confianza en que el PP muestre una actitud “constructiva” y puso el acuerdo sobre gasto farmaceútico como “buen ejemplo” de que hay temas importantes que pueden quedar al margen de la confrontación partidaria y primar sobre todo “los acuerdos, la austeridad y la cooperación”.

En esa misma línea, el presidente espera que pueda haber acuerdo el próximo lunes en el Consejo de Política Fiscal y Financiera para comprometer a las comunidades autónomas en la reducción del déficit, y también para que el PP acabe respaldando la Ley de Economía Sostenible.

Pidió para ello expresamente a Rajoy que se lea la ley, a pesar de que es “muy larga” y de que contiene aspectos “muy técnicos”, y que repase también el informe del Consejo de Estado sobre ella.

“No se pueden despachar las cosas con esa ligereza”, aseguró, después de que Rajoy asegurara que esa ley no es ni buena ni mala porque carece de efectos prácticos sobre la economía.

Como está ocurriendo ya con el pacto sobre el gasto farmaceútico, aseguró, los ciudadanos lo valorarán como un “mérito de todos” y muestra de la capacidad de los partidos de poner soluciones por encima de las confrontaciones partidistas.

Rodríguez Zapatero rechazó que la aprobación en Sevilla de este proyecto de ley, así como otras medidas aprobadas en el Consejo de Ministro relacionadas con Andalucía puedan ser tachadas de “electoralismo” en un momento en que las encuestas cuestionen la mayoría socialista en la comunidad autónoma.

Recordó, para conjurar esa afirmación, que fue en junio cuando anunció que este proyecto se aprobaría en esta comunidad, y subrayó también que su reciente presencia en Andalucía se debió a un congreso que celebraron los socialistas andaluces para completar el relevo de Manuel Chaves al frente del partido tras su nombramiento como vicepresidente tercero del Gobierno.

Griñán subrayó el compromiso del Ejecutivo central con Andalucía, su determinación para afrontar los problemas de la comunidad autónoma, y su intención de situarla como “actor principal” de la estrategia de economía sostenible.