Así se desprende de las palabras del vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Ejecutiva Nacional, en la que el partido reafirmó su estrategia de negociación, basada en el acuerdo suscrito con el PSOE y que contiene elementos “irrenunciables” que se mantendrán en la reunión con Podemos, prevista para finales de esta semana.

Esos pilares son la unidad y la igualdad de todos los españoles, lo cual implica descartar cualquier consulta soberanista; el cumplimiento de los objetivos de déficit y de los demás compromisos de España con la Unión Europea, compaginándolo con políticas de crecimiento y sin subir impuestos a las clases medias; y mantener el consenso en política antiterrorista.

El acuerdo se puede “ampliar” y “mejorar” pero manteniendo esos ejes, dijo Villegas, y siempre sobre la premisa de que “no vale” con ganar la votación de investidura, sino que es necesario tener una mayoría suficiente que permita acometer esas reformas.

Por ello, desde Ciudadanos siguen llamando al PP a sentarse a negociar, ya que su mayoría absoluta en el Senado y su mayoría de bloqueo en el Congreso lo hacen necesario para dar estabilidad a esas reformas. Villegas insistió en que el escenario “ideal” sería la participación del PP en ese acuerdo, y considera además que el anuncio por parte de Mariano Rajoy de medidas de conciliación que ya están incluidas en ese documento puede interpretarse como “un acercamiento muy suigéneris”.

Si el PP mantuviera su negativa sería “muy complicado” gobernar contando solo con la abstención de Podemos y otras fuerzas, pero Villegas cree que “vale la pena” intentar hacerlo antes que ir sí o sí a la repetición de las elecciones generales. Puede ser, añadió, que los “problemas internos” de Podemos y su “miedo” a unos comicios con encuestas “adversas” facilite su abstención.

En todo caso, la posición de Ciudadanos dependerá de lo que Podemos plantee en esa reunión prevista para el jueves o el viernes de esta semana, en la que mantendrá su compromiso “irrenunciable” de evitar una consulta soberanista. Cree que en ese asunto Íñigo Errejón, Ada Colau o Xavier Domènech dicen “cosas diferentes” y lo único claro es que su formación no dará “un paso atrás ni al lado” en la defensa de la unidad y de la igualdad.