Presentada por el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, Arrimadas participó en un encuentro informativo organizado en Madrid por Europa Press, en el que insistió en la necesidad de “reformar” España para que funcione correctamente y pueda afrontar los retos pendientes.

Aseguró que Ciudadanos ahora mismo es “la única garantía de una España unida y reformada”, ya que el PSOE ha experimentado “virajes ideológicos” en Cataluña y el PP “ha abandonado” la política para responder a esos desafíos soberanistas. Que se debata una moción instando a no cumplir las resoluciones judiciales, puso como ejemplo, es algo que solo puede pasar “cuando llevamos mucho tiempo sin hacer política”.

Cree que en las actuales circunstancias y dada la pluralidad del escenario político “quien no está capacitado para sumar no está capacitado para gobernar”, y con ese argumento volvió a llamar al PP a la negociación para conformar un Gobierno “constitucionalista, reformista”.

“No hay muchas más alternativas que sean buenas para España”, advirtió, convencida de que España debe gobernarse “desde el centro, no desde los extremos”.

Insistió, en ese sentido, es que no es necesario “elegir entre extremos”, y que se puede ser a la vez “nuevo” y “sensato”, firme contra la corrupción y a la vez cuadrar las cuentas, y una de las ventajas de Ciudadanos es que puede negociar con todos para articular una mayoría con “lo mejor de una parte y de otra”.

“Somos un partido de Gobierno, pero no de cualquier Gobierno”, precisó, y por eso si el secreatio general del PSOE, Pedro Sánchez, “gira” y permite que España esté gobernada por Podemos y los independentistas, “no vamos a dar apoyo a esa opción”. Eso no impediría, dijo después, llegar a acuerdos con la formación de Pablo Iglesias en asuntos como la regeneración democrática.

Aseguró que no se identifica con los adjetivos “agresivo y maximalista” que Iglesias dirigió a los negociadores de Ciudadanos. “Viniendo de quien vienen no sé si es lo más adecuado”, añadió Arrimadas, que criticó también al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, por entender que no ha cumplido con los valores de diálogo, valentía y “querer afrontar los problemas” que se presuponen a un líder político.

Más allá de “giros dialécticos” del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, para intentar “suavizar” su mensaje, Arrimadas cree que el trasfondo político sigue siendo el mismo que antes y Ciudadanos seguirá “hablando claro” para defender la unidad y la igualdad de todos los españoles, no solo presentando recursos sino “haciendo política” y explicando a los catalanes “por qué nos perjudica” ese plan soberanista.

Arrimadas criticó el manifiesto de quienes creen que ella, nacida fuera de Cataluña pero catalanoparlante, es “una colona lingüística involuntaria”, y a Podemos por ser un conjunto de “amalgamas” que ha tenido buen resultado electoral pero que impide tener un proyecto común para toda España.

Preguntada expresamente por la crítica de Ciudadanos al concierto económico vasco, subrayó que quedará “obsoleto” cuando se avance hacia la integración fiscal europea y será necesario consensuar con serenidad y seriedad otro modelo.