Según informó UGT, los avances logrados hasta el momento, tras la reunión mantenida este jueves, permiten pensar "razonablemente en el éxito final de las negociaciones".

En este sentido, subrayan que tras 15 meses de negociación del convenio de banca con dos prórrogas de su vigencia, "estamos en un punto donde se debe resolver".

Para UGT sólo son posibles dos vías: concluir el periodo de negociación y vigencia del convenio abriendo el camino del conflicto laboral o bien caminar en la vía de lograr un acuerdo en la línea de las bases del pacto de diciembre.

Por ello, pide a la patronal que renuncie a la liquidación de la antigüedad (trienios) y la ampliación de la movilidad geográfica.

Por su parte, desde CCOO consideran que esta nueva prórroga es una oportunidad a la negociación. "Desde el sindicato hemos aceptado la prórroga entendiendo que lo que hemos estado trabajando hasta ahora puede que por primera vez se consolide en una posibilidad real de cierre de un convenio colectivo para el sector", apuntan.

Por ello, el sindicato dice que es preciso que la patronal acepte, entre otras propuestas, un incremento salarial cercano al 5% para los cuatro años de vigencia (2015 a 2018), cambios en la clasificación profesional o un sistema retributivo y homogeneización del sector en cuanto a número de pagas.