Así lo afirmó el foro este jueves en un comunicado, en el que acusa a la Asamblea de Madrid de “despreciar” la pluralidad de ideas y concepciones sobre la sexualidad al impulsar una ley de identidad de género "al amparo de la libertad ideológica y religiosa" y pretender "poner la Administración autonómica al servicio de un nuevo totalitarismo que quiere convertir en perseguible y sancionable discrepar de esa visión de la sexualidad".

Varios obispos madrileños mostraron su opinión en una carta sobre la citada ley, misiva por la que que el Observatorio Español contra la LGTBfobia ha anunciado que los denunciará ante la Fiscalía. A ello se suman otras medidas, como la propuesta del Grupo de IU-Los Verdes del Ayuntamiento de Getafe de nombrar a uno de los obispos firmantes ‘persona non grata’.

En este contexto, el presidente del Foro de la Familia, Mariano Calabuig, defiende que estas iniciativas contra quienes no están de acuerdo con la nueva ley es “el círculo vicioso de la nueva tentación totalitaria”.

“Un lobby logra que una ley apoye sus opiniones sobre un tema tan discutible y discutido como la sexualidad y a continuación se pretende meter en la cárcel a quienes tengan otra idea sobre la sexualidad humana bajo la disculpa de que discrepar es incitar al odio. Si triunfase la postura de corte totalitario de este Observatorio liberticida, en España se habría acabado con la libertad de pensamiento en materia de sexualidad”, dijo.

Calabuig confía en que la justicia defienda la libertad de pensamiento en materia de sexualidad y libertad religiosa y de educación y que no se deje presionar por quienes, “en nombre de la ideología de género, quieren acabar con la libertad de los que no opinan como ellos”.