Cáritas denuncia la hipocresía social hacia las mujeres prostituidas y pide que se respeten sus derechos
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El perfil mayoritario de las mujeres prostituidas con las que trabaja Cáritas corresponde al de mujeres jóvenes, de origen extranjero (nigerianas, rumanas y brasileñas), bajo nivel educativo y con menores a su cargo.
Ante ellas, la sociedad se comporta de forma "hipócrita", pues "por un lado estamos debatiendo la incorporación de la prostitución en el PIB y por otro lado estamos expulsando a las mujeres a las periferias”. Así lo subrayó este jueves Hilde Daems, del programa de Mujer, Prostitución y Trata de Cáritas, en un encuentro informativo en Madrid en el que se presentó el documento ‘La prostitución desde la experiencia y la mirada de Cáritas’, elaborado a partir de la experiencia que la ONG católica desarrolla desde hace 30 años en 10 proyectos en todo el país, con los que atiende al año a 2.200 mujeres.
Esas mujeres proceden de situaciones de pobreza y exclusión, y a veces han sufrido discriminación y violencia. Los voluntarios de la ONG acuden a los lugares donde ejercen (la calle, clubs, pisos) y casi la mitad de esas mujeres atendidas acuden a los centros de Cáritas. Una vez que se crea con ellas un vínculo de confianza cuentan sus experiencias, pero también “sus miedos y sus sueños”.
(SERVIMEDIA)
10 Mar 2016
AHP/gja