El incidente tuvo lugar cuando los diputados republicanos Joan Tardà y Gabriel Rufián intentaron responder al hecho de que el portavoz de Ciudadanos, Juan Carlos Girauta, sostuviera que no era cierto que su partido no hubiera condenado el franquismo en un debate en el Parlamento catalán, acusación que antes había formulado ERC.

Girauta pidió la palabra al final de la sesión de investidura de esta tarde, para negar, como había sostenido Rufián, que la formación naranja se había negado a condenar el franquismo en la Cámara catalana.

El presidente del Congreso permitió al portavoz de Ciudadanos que argumentase en este sentido, pero se negó a darle un turno también a ERC para que argumentara en sentido contrario. El incidente tuvo lugar poco después de que el portavoz del PP, Rafael Hernando, sí que lograse brevemente la palabra para quejarse de que López permitiese hablar a la formación naranja y no a los populares.

Fue en ese momento cuando Tardà, Rufián y los otros diputados de ERC se pusiern de pie y, con el micrófono desconectado, pidieron que se les dejará hablar. En este sentido, se pudo escuchar a Tardà gritar “le pedimos que nos dé la palabra” y afirmar “no es cierto, no es cierto”, en referencia a que Ciudadanos hubiera condenado el franquismo en el Parlamento catalán.