En rueda de prensa después de reunirse con el portavoz del PNV, Aitor Esteban, Hernando agradeció expresamente la disposición de ese partido a "facilitar la gobernabilidad", algo que considera una "buena noticia" en el proceso de negociaciones con las diferentes fuerzas parlamentarias.

Percibe una "cercanía global" en los ámbitos económico y social y ambas formaciones seguirán trabajando para avanzar y concretar. Esteban había denunciado el espíritu "recentralizador" que rezuma el documento sobre el que el PSOE basa la negociación, pero Hernando precisó que no hay "nada más lejos" de su intención. Para deslejar dudas reiteró la defensa del autogobierno y de las competencias estatutarias de Euskadi y de las demás comunidades autónomas.

Hernando anunció que el martes de la próxima semana la comisión negociadora del PSOE se reunirá con los portavoces de Democràcia i Llibertat y de ERC, en ambos casos "a los efectos que ustedes saben", es decir, dejar claro que los socialistas no comparten la hoja de ruta independentista y defienden el marco constitucional. Sobre esa premisa, dijo, hablar es "razonable" aunque solo sea por respeto a los electores de cada formación.

El balance general de Hernando es que con cada conversación permite vislumbrar "más posibilidades de que haya un Gobierno de cambio y progreso en España", aunque no quiso ir más allá en sus augurios.

El PSOE no está de acuerdo con la celebración de un referéndum en Cataluña pero Hernando se declaró "encantado" ante la posibilidad de hablar de ello con el portavoz de En Comú Podem, Xavier Domenech. También con el líder de Podemos, Pablo Iglesias, precisó, al ser preguntado expresamente sobre ello.

Sin embargo, no avanzó si habrá algún movimiento concreto por parte del PSOE para recuperar la negociación con Podemos sin abandonar las conversaciones con las demás formaciones, entre ellas Ciudadanos. Dejó claro, eso sí, que Íñigo Errejón tiene el documento de negociación enviado por los socialistas.

Las palabras más gruesas de Hernando fueron para el Gobierno por las declaraciones "graves e insultantes" del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, al decir que ETA espera "como agua de mayo" un Gobierno del PSOE con Podemos.

Considera "una vileza" decir eso en plenas negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez, y la única explicación que encuentra es que el miedo del PP a ir a la oposición le hace "perder el sentido común y el sentido de Estado", lo cual es "una muestra de desesperación".