Al salir de una reunión del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, que presidió Mariano Rajoy, Casado justificó la decisión de su líder con el argumento de que "no se puede ir a una sesión de investidura si no se cuenta con los apoyos para ser investido". "No me han llegado esas críticas", agregó.

Casado afirmó que haberse presentado sin tener los apoyos hubiera generado "escenificaciones que no llegan a ningún lado" e hizo un llamamiento para que PP, PSOE y Ciudadanos puedan entenderse con el objetivo de crear un gobierno amplio de consenso que defienda la unidad de España, la lucha contra el terrorismo y la recuperación económica.

En este sentido, manifestó que el PP mantiene su "mano tendida" al PSOE y a Ciudadanos para negociar y buscar puntos de acuerdo con Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, porque entre los populares no se cuestiona el liderazgo del presidente en funciones.