En los pasillos del Congreso, Reyes se refirió a la queja de Podemos tras la asignación de escaños decidida por la Mesa, que los relega a las últimas filas del hemiciclo, la zona conocida como "gallinero", sin presencia en las de mayor visibilidad.

"La Mesa tiene que estar abierta a cualquier tipo de petición, por supuesto que sí", dijo Reyes al ser preguntada por la disposición a valorar la propuesta alternativa que ha anunciado la formación de Iglesias.

Sin embargo, no quiso avanzar la posición que tomaría su formación, y restó importancia a la queja de Podemos al asegurar que lo importante son los contenidos, no los escaños que ocupe cada cual.

La propuesta de ubicación partió de la vicepresidenta primera, la socialista Micaela Navarro, porque es "costumbre" que sea ese cargo quien la hace. Son "cuestiones administrativas", dijo, que ella y los demás miembros de la Mesa se encontraron "hechas" sin conocerlas de antemano.