Desarticulada una organización que traía a España ciudadanos nigerianos para explotarlos

MADRID
SERVIMEDIA

La Policía Nacional ha desarticulado una organización dedicada a la introducción ilegal de ciudadanos nigerianos en España, algunos de ellos menores de edad, para su explotación sexual en el caso de las mujeres, y el ejercicio de la mendicidad en el de los hombres.

La Policía, a través de un comunicado, informó que, con el fin de regularizar la situación administrativa de las víctimas, la organización utilizaba el método de fingir la constitución de parejas de hecho o bien simular matrimonios de conveniencia con ciudadanos españoles.

La operación se ha saldado con la desarticulación de la organización y la detención de once de sus miembros en Granada y la liberación de tres víctimas a quienes se les ha ofrecido medidas de protección.

Según informó la Policía, la operación comenzó en febrero del año pasado y la investigación llevó a los agentes hasta una organización criminal asentada en Granada, formada por ciudadanos nigerianos y dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual y el ejercicio de la mendicidad.

La organización captaba tanto a hombres como mujeres, incluso menores de edad, en su país de origen, normalmente Nigeria, y las introducían ilegalmente en España para su posterior explotación. Una vez en España, las mujeres eran obligadas a ejercer la prostitución en las calles o en clubes de alterne hasta saldar por completo la enorme deuda contraída con la organización.

El control que ejercían sobre ellas era absoluto, indicándoles la forma de vestir y cómo comportarse para captar clientes, así como las cantidades que debían percibir por los servicios sexuales prestados.

Por su parte, los hombres eran obligados a ejercer la mendicidad en las calles de Granada, siendo controlados en todo momento por miembros de la organización, que disponían dónde debían colocarse, durante cuánto tiempo y la cantidad de dinero que debían recaudar.

La organización concertaba acuerdos entre las víctimas en situación irregular y ciudadanos españoles captados por ellos, que se prestaban a simular un matrimonio o fingir ser pareja de hecho a cambio de dinero. Después hacían las gestiones necesarias para la celebración del matrimonio o la inscripción de la pareja en el correspondiente Registro de Parejas de Hecho, con lo que las víctimas lograban regularizar su situación administrativa.

(SERVIMEDIA)
23 Ene 2016
DSB/man