Según informó la Policía, las detenciones se han realizado en el marco de una operación llevada a cabo en colaboración con la Agencia de Seguridad Alimentaria y Económica de Portugal.

Esto ha propiciado que en el país vecino se hayan efectuado 12 registros en domicilios particulares, así como en cuatro en almacenes y en una fábrica. Los agentes portugueses han intervenido 36.000 prendas falsificadas, seis máquinas para la fabricación de calzado y 15.500 euros en efectivo.

En lo que se refiere a España, de los 21 arrestos, 12 han sido en Pontevedra, cinco en La Coruña, dos en Gijón, uno en Valencia y otro en Málaga. También se ha capturado en territorio nacional al cabecilla de este grupo delictivo. A todos esros implicados se les acusará de delitos de pertenencia a organización criminal, contra la propiedad industrial e intelectual y blanqueo de capitales.

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Los agentes también realizaron 17 registros domiciliarios en Pontevedra, La Coruña, Gijón, Valencia, Málaga, Pamplona y Huelva. Inspeccionaron seis establecimientos e intervinieron 7.000 artículos que vulneraban los derechos de propiedad industrial e intelectual. Además se bloquearon cuentas bancarias con aproximadamente 3.000.000 de euros.

La investigación comenzó el año pasado, cuando los agentes descubrieron la existencia de un grupo organizado compuesto por ciudadanos españoles y extranjeros, dedicado a la fabricación y adquisición de prendas de ropa de prestigiosas marcas, falsificadas en varias fábricas clandestinas de Portugal.

Los agentes comprobaron que se trataba de una estructura perfectamente organizada y liderada por un ciudadano de origen marroquí, asentada en Pontevedra. Las prendas se transportaban a través de empresas de paquetería a distintos puntos de la geografía española, donde se ponían a la venta callejera en zonas de costa y otros mercados.

Blanqueaban los beneficios a través de varios establecimientos con actividad legal, envío de dinero en efectivo, o por medio de transferencias al extranjero desde diversas cuentas bancarias.