Se trata del cuarto estudio promovido por la Fundación Arte y Mecenazgo que impulsa 'la Caixa' para el estímulo y divulgación del coleccionismo de arte como fuente de mecenazgo de la cultura.

El ensayo resulta novedoso por las disciplinas desde las que se analiza el mecenazgo, profundizando en sus implicaciones éticas, filosóficas, sociológicas y educativas. De esta forma, la fundación prosigue su análisis del mecenazgo en toda su extensión, completando estudios ya iniciados sobre el mismo relativos a cuestiones económicas, regulatorias o históricas.

Resalta la importancia histórica que ha tenido el mecenas como "facilitador" en el mundo del arte, reflexiona sobre la ética y la moral que rodean al coleccionismo y al mecenazgo, teoriza sobre el fenómeno como hecho social, y se pregunta cuál debe ser su papel en la educación.

”Queremos estudiar a fondo diferentes puntos de vista", explicó en la presentación Elisa Durán, directora general adjunta de la Fundación Bancaria ‘la Caixa’. "Se trata de tener una definición, lo más completa posible del mecenazgo artístico ahondando en sus fundamentos".

Francisco Calvo Serraller, catedrático de historia de Arte Contemporáneo, ensayista y crítico, coordina este cuaderno y plantea el trasfondo histórico del mecenazgo explicando qué es la generosidad desde el punto de vista etimológico. “Hay que ahondar, hay que explorar qué hemos hecho a través del arte, incluso del mecenazgo. Era muy importante plantearnos, no solamente cómo lo gestionamos o qué intereses se involucran, sino qué ha sido de todo es ideal, en qué se apoya y qué significa eso de la generosidad desde que tenemos memoria”.

“El mecenazgo es ético, es generosidad, es altruismo, es donar, pero en el mundo en que vivimos, el papel del mecenas está bajo sospecha”, aseguró Victoria Camps, que reflexiona en este informe sobre el valor moral y ético del mecenazgo. “Cuando sospechamos del mecenazgo pensamos que los intereses que hay detrás del mecenas, no son del todo pulcros. Desde esa perspectiva, los móviles del mecenas son tres: gusto por el arte, una posibilidad de inversión y una voluntad de adquirir un prestigio social. Tres intereses irreprochables, que tienen que estar bien equilibrados, si no es así hay que ver si desde el punto de vista de la ética se puede hacer algún reproche”, concluyó Camps.

José Luis Pardo aborda en este cuaderno el sentido más antropológico de el don y de la donación. “Siempre hemos tenido más palabras, más símbolos, más significantes, que significado. Desde que hay cultura todo tiene significado pero tardamos mucho en saber qué significado tiene. Ese exceso de significante y esa falta de significado es el desajuste gracias al cual es posible que haya cosas, como obras de arte”

Por último, José Antonio Marina, explicó que su aportación al informe ha sido escribir sobre la relación entre mecenazgo artístico y educación. “Hasta hora", puntualizó Marina, "la educación era una cadena de transmisión, pero ahora la sociedad no sabe muy bien qué tiene que transmitir ¿Cómo unir esto al mecenazgo? Pues enseñando la virtud de la generosidad, una de las pocas virtudes junto con la valentía, que ha sido valorada en todas las culturas”.