El juicio tendrá lugar en una sala de la Escuela Balear de la Administración Pública, ubicada en el Polígono de Son Rossinyol, donde el Tribunal Superior de Justicia de Baleares celebra los macrojuicios. Las instalaciones fueron cedidas por el Gobierno balear para la celebración de las vistas con múltiples acusados.

En el juicio del 'caso Nóos' la Infanta estará situada en el lugar más cercano a la prensa y estará separada de Urdandarin por otros tres procesados. El exduque de Palma tendrá a su izquierda a su exsocio Diego Torres.

La sala dará cabida a 18 abogados; el fiscal Anticorrupción, Pedro Horrach, que estará acompañado de un adjunto; los representantes legales de Baleares y los tres abogados del Estado. En segunda fila se situarán las dos acusaciones populares.

La abogada del sindicato Manos Limpias, que ejerce la acusación popular, Virginia López, presentó un escrito ante la Audiencia de Palma en el que se quejaba de su ubicación y reclamaba que la situasen en primera fila, junto a la Fiscalía y los abogados del Estado.

18 ABOGADOS

Justo enfrente se situarán las defensas. Son un total de 18 abogados, entre los que se encuentra el defensor de la infanta Cristina, Miquel Roca.

En el bloque situado a la derecha de los abogados estará el espacio destinado al público en general, ya que se trata de una audiencia pública, en la que se permitirá la entrada a 36 personas por riguroso orden de llegada.

En cuanto a los acusados, la Infanta estará sentada de frente a las tres magistradas que forman el tribunal y junto a la zona asignada a la prensa, en un extremo de la última fila, justo detrás de Ana María Tejeiro, la mujer de Diego Torres. Los dos principales acusados, el citado Torres y Urdangarin, ocuparán un lugar juntos al otro extremo de la tercera fila.

La expectación mediática que ha generado el juicio ha planteado problemas logísticos. La asistencia de casi 600 periodistas al juicio ha obligado a acondicionar unas dependencias cercanas como sala de prensa con proyectores que reciben la señal de la sala y 120 puestos de trabajo para los informadores.

Además, en la sala de vistas se han instalado cuatro cámaras de televisión que estarán dirigidas al tribunal, a los acusados, a las acusaciones y a las defensas. La realizadora de esa retransmisión será una mujer que ha ganado el concurso público convocado para conceder la transmisión del evento.

La inversión en medios para la prensa ha sido sufragada por el Ministerio de Justicia, y servirán para cubrir los macrojuicios que se celebren en cualquier parte del territorio nacional.