Así lo expresa el PP en una proposición no de ley presentada en el Congreso de los Diputados para dar a esta disciplina "la categoría que han otorgado once sistemas sanitarios europeos", así como países de otros continentes, donde la foniatría es ya una especialidad o una subespecialidad.

Y es que, argumenta la proposición, "siete años después de que la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias regulara la creación de las áreas de capacitación específicas y pese a haber sido aprobada una proposición de ley favorable en el Congreso de los Diputados (...), sigue habiendo un vacío legal en nuestro país que impide a los profesionales que ejercen actualmente la foniatría acreditar de forma adecuada su formación en la especialidad".

"Esta laguna", continúa el texto, impide por otro lado el desarrollo de un programa de formación debidamente regulado, que ofrezca los necesarios controles de acreditación del centro y del médico en formación.

Esto ha supuesto, por ejemplo, que las escuelas de formación profesional en foniatría hayan dejado de funcionar y que el título propio de centros como la Universidad de Salamanca se haya paralizado a la espera de que se reconozca a esta disciplina como un área de capacitación específica, explica el PP.

Por último, el Grupo Popular señala que con su proposición no de ley pretende también acercar el ratio español de foniatras por número de pacientes (que en la actualidad es de un experto por cada 400.000 ciudadanos) a los estándares recomendados internacionalmente, que se sitúan en un foniatra por cada 200.000 habitantes.