Rolnik, en una rueda de prensa en Ginebra (Suiza) donde presentó un análisis de los efectos sobre el derecho a la vivienda de los Juegos Olímpicos y la Copa del Mundo de Fútbol, reconoció que estos acontecimientos producen un legado positivo en las ciudades donde se celebran.

Sin embargo, se mostró preocupada por la práctica de desalojos forzados, el encarcelamiento de personas que viven en las calles, la penalización a los vendedores ambulantes y el desmantelamiento de asentamientos informales que se encuentran cerca de los estadios.

Rolnik agregó que también son "alarmantes" las consecuencias indirectas sobre el derecho a la vivienda en estos "megaeventos" deportivos, como el aumento de la renta y el precio de la propiedad, que quedan fuera del alcance de la población de ingresos más bajos.

En el estudio presentado hoy, Rolnik urgió a los gobiernos, al Comité Olímpico Internacional (COI) y a la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) a actuar "con responsabilidad" en la celebración y organización de los Juegos Olímpicos y el Mundial de Fútbol.