Tras tomarle declaración este martes, el juez considera que hay pruebas suficientes para acreditar que el arrestado se dedicaba a difundir material propagandístico de Daesh y a hacer proselitismo y captación de posibles adeptos.

Entiende también que el abultado material que se le encontró en el ordenador y el tiempo prolongado que llevaba realizando esta actividad acredita que el hombre podría ser autor de un delito de pertenencia a organización terrorista. El investigado ha negado todas las acusaciones.

El detenido, de 34 años y nacionalidad española, tiene según los investigadores grandes "dotes para la manipulación". Se le detectó al seguir la pista de un menor residente en Ceuta que pretendía viajar a Siria y unirse al autoproclamado Estado Islámico.

La Guardia Civil quiere averiguar si el arrestado colaboró en el envío de alguno de los menores captados para integrarse en el grupo terrorista. El número de detenidos en España por presunta vinculación a esta organización después de los atentados de París se eleva ya a una decena.

Hasta ahora se ha podido constatar que el detenido realizaba labores de captación y adoctrinamiento de jóvenes con perfil vulnerable, a quienes ofrecía ayuda para desplazarse a zonas de conflicto y unirse al Daesh, de acuerdo con las autoridades. Una vez que realizaba con éxito la primera aproximación, seguía con los contactos a través de mensajes y mediante Internet para rematar el proceso de adoctrinamiento.