De esta forma, España se sitúa entre los países con un menor uso del comercio electrónico y por debajo de Estados como el Reino Unido (81%), Alemania (73%) o Francia (65%). No obstante, supera a otros países como Italia, donde sólo el 26% compró a través de la Red.

Los países con un mayor uso del comercio electrónico en la UE son Reino Unido, Dinamarca (79%) y Luxemburgo (78%), mientras los que tienen un porcentaje más bajo son Rumanía (11%), Bulgaria (18%) y Chipre (23%).

Por tramos de edad, los que más compran a través de Internet son los usuarios de entre 25 y 34 años, con un 74% de media en la UE y un 63% en España.

En cuanto a los productos y servicios más demandados, España supera a la media comunitaria en viajes y alojamientos turísticos, con un 63% frente a la media del 52% en la UE, y en entradas a eventos, con un 43%, frente al 37% de la UE.

En cuanto a los productos de ropa y de deporte, España se sitúa en el 50%, diez puntos menos que en la UE; en productos del hogar y juguetes alcanza el 29% (41% de media comunitaria), y en libros y revistas, el 23% (33% en la UE).

Por último, los datos de Eurostat muestran que el 70% de los usuarios que compraron por Internet no tuvieron ningún problema, mientras que el 16% sufrió retrasos en la entrega, el 12% tuvo problemas técnicos durante el proceso de compra y el 8% recibió productos dañados. Los casos de fraude afectaron a un 3% de los compradores.