En el Congreso de los Diputados, donde participó en el acto oficial del Día de la Constitución, Rivera insistió en la existencia de una "operación" por parte del PP y del PSOE para "salvar al soldado Sánchez" y con ello al bipartidismo.

Reiteró que esa operación busca apuntalar al bipartidismo "decadente" con la disposición del PP y del PSOE a hacer presidente al candidato rival antes que al de Ciudadanos.

Por ello, reclamó a los ciudadanos una mayoría "amplia" que permita a su partido ser "libre" para enviar al bipartidismo a la oposición y hacer los cambios que España necesita, que van mucho más allá de una mano de "pintura azul o pintura roja".

Rivera achacó las críticas a Ciudadanos al hecho de que el partido ocupa el centro ideológico y por ello desde el PP le acusan de ser de izquierdas y desde el PSOE le consideran de derechas, pero ambos tratan solo de "mentir" llevados por el "miedo" al hundimiento del bipartidismo.

De hecho, se preguntó si Pedro Sánchez considera "de derechas" a Susana Díaz por haber acordado su investidura en Andalucía con Ciudadanos, y lo mismo a Mariano Rajoy por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes.

Cree que "los nervios se están apoderando de la vieja política" pero serán los ciudadanos los que decidan esa mayoría.

En todo caso, rechazó la posibilidad de un tripartito en el que esté Ciudadanos y también PP o PSOE porque "no pueden hacer cambios quienes no creen en ellos". Su partido, dijo, o gobierna o estará en la oposición, "pero no creemos en el proyecto de Sánchez ni en el de Rajoy".