Podemos ha empezado con fuerza esta carrera al 20-D con un objetivo claro que se pudo sentir en un emotivo acto en el que el líder de Podemos pidió el voto junto a su padre, Javier Iglesias, en un acto en Villaralbo (Zamora). Los aproximadamente 200 kilómetros que separan Madrid de este pueblo parecieron no importar, si de lo que se trataba era de pedir el voto del medio rural en una campaña en la que el partido ha querido dibujar un perfil más personalista.

Ayer viernes, en el arranque de campaña, Podemos se quiso desplazar hasta Cádiz para reivindicar junto al alcalde gaditano, José María González ‘Kichi’, las “alcaldías del cambio”. Sin embargo, la presencia de Podemos en este lugar no es casual, ya que el mismo 4 de diciembre pero de 1977 se reivindicó el nacionalismo andaluz.

Con este gesto, y con el hecho de que Cádiz fuera “cuna de la primera Constitución española”, el partido morado ha querido defender que el derecho a decidir no sólo es un sentimiento que se está viviendo en estos momentos en Cataluña con su anhelo soberanista, sino que en Andalucía “ya fueron pioneros” en esto de reivindicar el nacionalismo.

La parada en el segundo día de campaña cambia de temática y se desplaza hasta Málaga, donde hoy a las 12.00 horas se presentará un documental sobre la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal de la mano de la jueza y candidata de Podemos Victoria Rosell y el secretario de Relaciones con la Sociedad Civil, Rafael Mayoral. El acto lo cerrará Iglesias.

Acto seguido, el equipo de campaña de los podemitas volará más de 750 kilómetros para plantarse en Cataluña, donde participará en un mitin, a las 18.00 horas, junto a la alcaldesa de la Ciudad Condal, Ada Colau.