Rajoy arrancó de esta forma la campaña de las elecciones generales en la sede nacional del partido en un acto en el que estuvo acompañado por su número dos en la lista por Madrid, Soraya Sáenz de Santamaría, con quien, brocha en mano, pegó los tradicionales carteles electorales.

“Ya puedo pedir el voto, pero os pido vuestro apoyo, esfuerzo, ilusión y entusiasmo, sois simpatizantes de un partido político serio”, trasladó Rajoy a unas 300 personas que agitaban banderas del PP, acompañados de bufandas azules, en la madrileña calle Génova.

Rajoy defendió ante los suyos en el arranque de los quince días decisivos hacia el 20 de diciembre que el eslogan del PP es “España en serio" porque en el PP se lo toman "en serio”.

“Mucha fuerza, vamos a ganar las elecciones”, les dirigió en la jornada en la que el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) subrayó que el PP ganaría las elecciones por ocho puntos de diferencia con el PSOE.

El candidato popular estuvo acompañado en el escenario, además, por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes; por la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, y por el presidente del Senado y cabeza de lista del PP a la Cámara Alta por Madrid, Pío García Escudero. Entre el público se encontraban, entre otros, los ministros Isabel García-Tejerina y Cristóbal Montoro, tres y cuatro en la lista por Madrid.

GRITOS DE "PRESIDENTE"

Rajoy reconoció que han sido cuatro años de legislatura “duros” y “difíciles para hacer frente a la crisis más dura”, pero defendió que “el pasado nos avala” y que hay que mirar “al futuro”. “Este partido sigue a disposición de los españoles”, subrayó.

A partir de ahí, el candidato a la reelección insistió en trasladar los que son sus cuatro ejes de campaña: crear dos millones de empleos, “cuidar a las personas”, defender la unidad de España y luchar contra el terrorismo porque "es enemigo de lo mejor que tenemos las personas" y porque "España estará dentro y fuera de España, donde haya que hacerlo, defendiendo la vida, la libertad y nuestros derechos".

Los mayores aplausos y gritos de “presidente” se los llevó Rajoy al asegurar que “con la unidad de España no se juega” porque, dijo, “no es negociable y la Constitución es la que es". "Mientras el PP gobierne ni se discute ni está en juego”, defendió.

El presidente del Gobierno reivindicó la igualdad de los españoles en "derechos, deberes y obligaciones". “Esto es un Estado de Derecho, es una democracia moderna y estamos sometidos a la ley todos los españoles, el presidente del Gobierno y de cualquier comunidad autónoma”, trasladó en alusión al presidente en funciones de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas.

Rajoy reivindicó, en un acto en el que los populares estrenaron una de las nuevas versiones de su tradicional himno, que el PP “lleva muchos años, que está en todos los lugares, que ha perdido elecciones y también las ha ganado y que siempre hay alguien que enarbola una bandera del PP".

"No somos un partido con un militante, somos 800.000 y muchos millones de votantes y simpatizantes", afirmó en referencia al personalismo del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, que critican los populares.