Durante la celebración de las Jornadas de Puertas Abiertas en el Congreso de los Diputados Iglesias acudió al hemiciclo para ser entrevistado en el programa de RNE que se emite en directo desde una mesa colocada en el centro del salón de plenos, donde habitualmente se ubican las taquígrafas y estenotipistas.

Una vez finalizada la entrevista, invitado por el conductor del programa, Iglesias se sentó en el escaño situado más a la izquierda del banco azul correspondiente al Gobierno, el que ocuparon Felipe González y después José Luis Rodríguez Zapatero, justo enfrente del ocupado por José María Aznar y esta última legislatura por Mariano Rajoy.

Los ciudadanos que en ese momento se encontraban en el hemiciclo recibieron ese gesto con aplausos, pero cuando una señora exclamó "Pablo Iglesias, presidente", un hombre comenzó a proferir gritos de "fuera, fuera", y fueron los demás ciudadanos quienes templaron los ánimos.

Iglesias aseguró que sería "un honor" ocupar ese escaño acompañado de los ministros y ministras de un Gobierno que sería paritario y estaría compuesto por "los mejores, los más preparados".

Sería, aseguró, un Gobierno del que los ciudadanos podrían sentirse "orgullosos" porque sería "accesible" y comparecería ante ellos en debates y en ruedas de prensa poniendo en valor la deliberación "con todo el mundo".