Intermón exige "blindar" la ayuda a los países pobres pese a la crisis
- Denuncia que con un 1% de los 18 billones de dólares otorgados a los bancos se cumplirían los Objetivos de Desarrollo del Milenio
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Intermón Oxfam reclamó hoy "blindar" la ayuda que tanto España como la comunidad internacional destina a los países en desarrollo para evitar que la crisis económica suponga "una catástrofe" para las personas que viven en las naciones pobres.
Así lo indicaron la directora del Departamento de Campañas y Estudios y el responsable de Relaciones Institucionales de Intermón Oxfam, Irene Milleiro y Jaime Atienza, respectivamente, en una rueda de prensa en Madrid con motivo de la presentación del informe "La realidad de la ayuda 2009".
Intermón alertó de que el recorte de unos 21.000 millones de dólares (unos 15.500 millones de euros) de la ayuda prometida por los principales países donantes para este año podría suponer "una catástrofe para la vida de millones de personas en los países más pobres".
Milleiro apuntó que el hambre ha pasado de afectar a unos 850 millones de personas en 2000 a los 1.200 millones en la actualidad y señaló que "con tan sólo un 1% de los 18 billones de dólares (más de 13 billones de euros) invertidos en sostener a la banca y las grandes empresas se podrían conseguir los Objetivos de Desarrollo del Milenio" para erradicar la pobreza.
Además, subrayó que la crisis económica está teniendo unos "efectos durísimos" en los países pobres, donde las familias que destinan el 80% de su renta a la alimentación pueden ver reducido el número de comidas diarias de tres a dos, sacar a los niños de la escuela para trabajar en el campo o que se incorporen al trabajo en sectores informales.
Milleiro animó a que los gobiernos "sean valientes y den un paso al frente" con la aprobación de una tasa sobre las transacciones financieras de un 0,05%, que podría generar unos 400.000 millones de dólares anuales (casi 300.000 millones de euros) para luchar contra la pobreza y los efectos del cambio climático.
Para evitar que los efectos de la crisis tengan "un impacto más importante" en los países en desarrollo, Atienza consideró imprescindible "blindar la ayuda al desarrollo y poner en marcha nuevas formas de financiación" que no "afecten al bolsillo de los ciudadanos".
Por último, Milleiro y Atienza reconocieron el "esfuerzo" de España en mantenerse entre los principales donantes de ayuda oficial al desarrollo, pero reclamaron una reforma de la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (Aecid) para lograr una mayor eficacia en la distribución de los recursos para las personas más necesitadas.
(SERVIMEDIA)
02 Mar 2010
MGR/caa